El evangelio, lo que es y lo que no. Deseo que este pequeño librito ayude a muchos a encontrar el evangelio Bíblico, a afirmar a los que están en él, y corregir al que ha desviado el camino.

Necesariamente existen cosas que no debemos dar por sentado intuyendo que cada generación entiende y sabe en qué consiste. Mucho más, si por el uso continuo de aquello, la manera de concebirlo se vuelve algo común.



Puede no parecer necesario para nosotros hoy preguntarnos ¿En qué consiste el Evangelio? ¿Acaso es necesario hablar de una definición precisa de lo que es? ¿Más que nunca la palabra evangelio o evangélico, es usada con algo más de amplitud, pero desafortunadamente damos por sentado que lo sabemos. Sin temor a la equivocación podemos afirmar, que se ha levantado una generación de hombres llamados evangélicos que no podrían definirlo en sus puntos más básicos. Seguramente muchos de ellos abarrotan las iglesias cristianas semanalmente y escuchan la palabra evangelio y sin embargo valdría la pena preguntarnos si quienes enseñan y quienes escuchan, ¿No estarán pensando y hablando algo que no saben de qué se trata?



Pero querido lector, ¿Podría definirlo usted? Deseo que este pequeño librito ayude a muchos a encontrar el evangelio Bíblico, a afirmar a los que están en él, y corregir al que ha desviado el camino.